Con la economía muy golpeada, que se está empezando a abrir, volver a una cuarentena total tendrá un efecto nefasto y echaría por tierra todos los planes de reactivación, advirtió el ministro de Hacienda, Benigno López. También lamentó los hechos de corrupción en las compras de insumos.

El efecto de la cuarentena fue durísimo para la economía y aunque ahora se está empezando a abrir lentamente, volver a cerrar todo complicará enormemente cualquier plan de reactivación que se intente impulsar. “Va ser nefasto el efecto económico, espero que no tengamos que volver a eso”, dijo el jefe del equipo económico.

No obstante, agregó que de darse el caso, tendrá que analizarse con el Ministerio de Salud los pasos a seguir, ya que la vida es un bien que no se puede recuperar, mientras que la economía si se va recuperar, aunque ese proceso exija unos años. Añadió que la expectativa de no volver a un cierre total, en parte va depender de cuan responsables seamos en esta etapa. “Tener que retroceder por irresponsabilidad nuestra sería grave para nosotros y las posibilidades de salida de las crisis va a complicarse desde el punto de vista económico, espero que todos seamos conscientes de la situación”, insistió López.

Dijo también que un escenario como el descrito complicará la recuperación de la actividad económica porque aumentará la incertidumbre en un momento que ya se percibía un mejor ambiente gracias a la reapertura de algunos sectores Según estimaciones oficiales, el Producto Interno Bruto (PIB) del país cerraría con una retracción del 2,5% debido a los efectos del aislamiento y cierre de actividades.

Hasta el momento, se registraron alrededor de 110.000 suspensiones laborales que deben ser recuperados en la brevedad. El Equipo Económico está trabajando en un plan de reactivación de la economía pospandemia, que también quedaría en suspenso ante cualquier cambio en los procesos de las fases de la cuarentena inteligente. El Ministerio de Salud advirtió este fin de semana que no descartan volver a una cuarentena total por regiones, ante el aumento de casos sin nexo y por el relajamiento en los cuidados por parte de los ciudadanos.

El plan de reactivación prevé una inyección de poco más de US$ 2.500 millones en los diversos programas a ser ejecutados, como obras públicas, préstamos de largo plazo, fondeo de los bancos estatales, reconversión productiva y comercial de empresas en general y mipymes, apoyo al comercio fronterizo y mantener la cobertura de los programas sociales para trabajadores formales e informales.

No descartan nuevos endeudamientos en caso en que se requiera financiación, anuncio que choca con resistencia de la ciudadanía, porque todavía no usaron la totalidad los fondos aprobados en el marco de la Ley de Emergencia. Ante cuestionamientos por los hechos de corrupción en las compras de insumos de salud, López lamentó que se intente empañar lo que con mucho esfuerzo se está llevando adelante para combatir el covid-19.  “Nos golpea que los procesos no se hayan realizado de la manera que se planeó, esperemos que solo sea una mancha y que los demás procesos avancen de manera eficiente”, manifestó.