Un policía asesinó a cinco personas: sus suegros, su cuñada y a sus dos hijos de uno y dos años, y luego se quitó la vida en la madrugada de este viernes en el barrio San Miguel de Capiatá. Otras dos personas fueron gravemente heridas y una sobrevivió al ataque. El homicida habría transmitido en vivo todo el hecho a su pareja, que vive en España, a través de una videollamada.

El autor de los asesinatos múltiples fue el oficial segundo de Policía Isidro Casco Salinas, según los datos recogidos del lugar.  Las víctimas son los suegros, la cuñada y los dos hijos que el oficial tenía con su pareja, una mujer que vive en España hace tiempo. Hay dos heridos de gravedad que fueron derivados a centros asistenciales y que aún no fueron identificados. Una mujer sobrevivió ilesa al ataque.

Los fallecidos fueron identificados como Alberto De La Cruz Riveros Benítez (53 años), Amalia Beatriz Caballero Portillo (50 años) — padres de la pareja del policía —; Liliana Mariel Gómez Caballero, menor de 16 años (hermana de la pareja, cuñada del oficial) y dos niños de uno y dos años respectivamente. Sumado el oficial, la cantidad total de muertes asciende a seis.

De acuerdo a vecinos del sitio, el hombre tenía bajo amenaza a la familia y se presume un trasfondo económico. En el lugar del hecho llegó primero la Policía Nacional y cerca de las 05:30 una delegación del Ministerio Público.

El comisario general Silvio Cantero, jefe de Policía del departamento Central, detalló a ABC que, según testigos, el hombre habría transmitido el hecho a través de una videollamada a su pareja.
“Se comentó que llegó (el policía) con videollamada. Eso va a ver el Ministerio Público con Criminalística. Tenía dos revólveres. Él le transmitió el hecho a su señora (…) vamos a averiguar si tenía antecedentes en la comisaría regional o en los archivos policiales. (…) La Justicia Policial es la que tiene que ver si hay algún sumario vamos a decir”, dijo Cantero.

La autoridad policial sostuvo que la pareja vive con su suegra (la madre del policía asesino) en España. “Según personas que viven en la casa él nunca amenazó a la familia, pero insistía en que sí iba a asesinar a sus hijos”, detalló el comisario Cantero.

Según datos recogidos en base a declaraciones de camaradas del asesino, Casco Salinas prestaba servicios últimamente en la Dirección de Tránsito de la Policía Nacional.