La Policía capturó ayer miércoles a un famoso criminal brasileño que acababa de instalarse en Pedro Juan Caballero supuestamente para asumir como nuevo jefe del hampa en la frontera y recuperar el control del tráfico de drogas y armas a favor del Primer Comando da Capital (PCC). En los últimos ocho años, pasaron otros nueve aspirantes a “patrón”.

El objetivo de la operación Terminus fue identificado como Willian Pereira Soares, brasileño, de 35 años de edad, alias Pitcharles, supuesto jefe de una célula del grupo criminal Primer Comando da Capital (PCC).

El extranjero fue detenido durante el operativo del Departamento Contra el Crimen Organizado (DCCO) de la Policía Nacional que se llevó a cabo ayer a las 06:00, cuando investigadores de esta unidad y comandos del Grupo Especial de Operaciones (GEO) de Amambay allanaron una casa alquilada que queda en una calle sin nombre, entre las calles Ramón Gill Sánchez y Pablino Cristaldo, en Pedro Juan Caballero, a 30 metros de la línea internacional que divide Paraguay y Brasil.

El procedimiento fue supervisado por la fiscala de Pedro Juan Caballero Katia Uemura.

Pitcharles tiene mandatos de prisión en su país por asociación para el tráfico, homicidio, organización criminal y porte ilegal de arma de fuego de uso restricto y tráfico de drogas.

Además, el extranjero registra antecedentes por daños (2007), tráfico de drogas (2007, 2008, 2010 y 2019), homicidio (2008, 2010, 2015 y 2019), robo (2008), tenencia ilícita de arma de fuego (2009, 2015 y 2019), alteración de marca de identificación de vehículo (2009), amenazas (2009 y 2015), formación de banda (2010), lesiones (2010), pertenencia a organización criminal (2014 y 2019), entrada de teléfono en prisión (2015) y asociación con tráfico de drogas (2019).

Estos datos fueron proveídos por la Policía Federal (PF) de Brasil, que de hecho ayudó en la identificación y localización de Pitcharles, ya que era uno de sus principales objetivos.

Policías de Crimen Organizado en la casa donde se escondía Pitcharles.

Acabaron con su reinado del jefe del PCC antes de que se iniciara

El subjefe de Crimen Organizado, comisario Pedro Lesme, explicó que el brasileño Willian Pereira Soares, alias Pitcharles, llegó recientemente a Pedro Juan Caballero con la bendición de la cúpula del PCC.

Los líderes de esta facción, quienes operan en San Pablo, le habrían encomendado a Pitcharles la misión de posicionarse como nuevo patrón de la frontera y de ese modo recuperar el control de tráfico de drogas y armas a favor de la organización criminal.

Sin embargo, con esta detención, queda nuevamente vacante el “puesto” de jefe del hampa fronteriza.

Los anteriores “candidatos” que disputaron el control de la frontera

Desde el asesinato del brasileño Jorge Rafaat Toumani, alias Turco, ocurrida en 2016 en Pedro Juan Caballero, nunca más hubo un “patrón” en la frontera, ya que todos los que intentaron llegar al “trono” fueron capturados.

Por ejemplo, los brasileños Jarvis Chimenes Pavão y Elton Leonel Rumich Da Silva, alias Galán, quienes de hecho operaron en alianza para desplazar a Rafaat, se traicionaron y comenzaron una guerra posteriormente.

Jarvis fue extraditado a Brasil en 2017 y Galán cayó en ese mismo país en 2018.

Luego apareció el brasileño Sergio de Arruda Quintiliano Netto, alias Minotauro, quien fue arrestado en Brasil en 2019.

Ese mismo año fue capturado y expulsado de nuestro país el también brasileño Levi Adriani Felicio.

Los últimos "patrones" que tuvo la frontera, antes de la captura de Pitcharles, materializada hoy en Pedro Juan Caballero.

El paraguayo Ederson Salinas Benítez, alias Ryguasu, hizo el intento en 2020 pero no logró captar la confianza del PCC. Lo asesinaron en Asunción en 2023.

En 2021, pasaron tres aspirantes a “patrón”, Giovanni Barbosa Da Silva, alias Bonitão; Weslley Neres dos Santos, alias Bebezão, y Anderson Menezes de Paula, alias Tuca, todos brasileños, actualmente presos en su país.

El último fue el también brasileño Cléber Riveros Segovia, alias Dogão, quien llegó a mandar desde 2022 hasta 2023, cuando fue asesinado en Brasil.

 

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