Una comitiva fiscal-policial ingresó a la bóveda en donde se sustrajo el dinero de la Asociación de Cambistas. Del lugar incautaron varios de los elementos utilizados para el “trabajo”. En el túnel se toparon con un aparato explosivo, por lo cual, tuvieron que salir de inmediato.

En prosecución a la investigación del hurto agravado en perjuicio de la Asociación de Cambistas de Ciudad del Este, efectivos policiales ingresaron a la bóveda, donde encontraron un boquete de 60 cm de diámetro que conecta con el túnel. De allí se incautaron dos celulares.

Seguidamente entraron al túnel cuatro policías, quienes incautaron botellas de plástico con adherencia de barro, equipos de oxigenación, motor extractor de aires, baterías, equipos de excavación, sogas, mazos hierros puntiagudos y un barrote de hierro tipo pata de cabra.

Asimismo, prendas varias, restos de comestibles, láminas pegadas a la pared, utilizadas como aislante acústico en base y restos de poliuretano en aerosol (isopor), elementos hidráulicos y aparato de GPS.

En el avance en busca de más evidencias, los intervinientes divisaron un presunto artefacto explosivo, el cual los espantó y los obligó a retirarse de inmediato.

La Policía Federal de la República del Brasil, en cumplimiento al Acuerdo Internacional de Cooperación del Comando Tripartito también participó del procedimiento. 

Se estima que el botín robado a los cambistas está en torno a los 15 millones de dólares. Una de las hipótesis es que, el PCC estaría detrás del atraco. La teoría cobra fuerza, considerando la sólida estructura utilizada para perpetrar el atraco, incluyendo todas las previsiones, logística, tiempo y elementos empleados en el robo.

 

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